Almirón: “Los números económicos no respaldan discursos optimistas de campaña”

El candidato a gobernador por La Libertad Avanza, Lisandro Almirón, presentó sus principales lineamientos de gobierno en una exposición ante la Federación Empresarial de Corrientes (Fecorr). Acompañado por Evelyn Karsten, candidata a vicegobernadora, y por los postulantes a la intendencia capitalina Any Pereyra y Flavio Serra, Almirón delineó las prioridades de su espacio político.

Planteó como ejes centrales la reducción de tasas e impuestos, la simplificación administrativa y un fuerte recorte en lo que calificó como “gasto estatal inútil”. “Queremos un gobierno que reduzca impuestos como el de sello y trabaje junto al sector privado para generar empleo genuino y de calidad”, sostuvo.

El dirigente aseguró que el objetivo de su espacio es “sacar definitivamente la pata del Estado de la cabeza del sector privado”, en sintonía con la visión liberal que promueve el presidente Javier Milei. En ese marco, defendió la necesidad de que el sector público actúe como facilitador de la actividad privada y no como un obstáculo.

CRÍTICAS AL FUNCIONAMIENTO DEL ESTADO

En su intervención, Almirón cuestionó la estructura provincial y el desempeño de las instituciones de control. Señaló que el delito de abigeato dejó de ser un problema aislado para convertirse en operaciones de “camiones jaulas organizados” en zonas de frontera. Relacionó esta situación con la falta de investigaciones profundas y la débil responsabilidad penal.

Planteó que el Estado no debe intervenir en cuestiones vinculadas al mercado, como la fijación de precios, ya que de lo contrario “todos tendrían derecho a que el gobernador les subsidie”. Al mismo tiempo, calificó a Corrientes como una provincia con un “Estado macrocefálico”, alejado de las prioridades del desarrollo económico.

El candidato afirmó que la Fiscalía de Investigación Administrativa “nunca fue designada”, lo que, según advirtió, debilita el control interno de la administración pública. También calificó de “desproporcionado” el gasto político y denunció la creación de estructuras de consejeros que funcionan como organismos partidarios sin representatividad real.

Criticó la gestión de la Dirección Provincial de Energía de Corrientes (DPEC), calificando como “irrisorio” que su conducción no se haya modificado en los últimos 15 años. A su vez, cuestionó al Tribunal de Cuentas por no cumplir con su función de revisar las cuentas de inversión, que se encuentran prorrogadas desde 2021.

INFRAESTRUCTURA, SALUD Y RESPONSABILIDAD POLÍTICA

Al referirse al Banco de Corrientes, Almirón expresó su preocupación porque la entidad, según señaló, está bajo monitoreo del Banco Central por dificultades para otorgar créditos. Aseguró que la institución se utiliza para “el gasto de privilegio político” de un reducido grupo de funcionarios y allegados.

Advirtió sobre la ausencia de políticas fiscales que promuevan la industrialización local, lo que obliga a que la producción provincial se traslade a otras jurisdicciones. También cuestionó que el presupuesto en salud se destine al “mantenimiento de la fachada de los hospitales” en lugar de priorizar la formación y retención de especialistas en el interior.

Sobre la obra pública, planteó la necesidad de promover la participación público-privada con procesos transparentes y licitaciones abiertas, en lugar de las contrataciones directas que, según afirmó, predominan en la actualidad.

En el tramo final de su exposición, pidió un ejercicio responsable del poder político. “El Estado no pertenece a un grupo reducido de personas”, afirmó, y subrayó que el poder “es una concesión circunstancial que dura 4 años”.

Asimismo, hizo un llamado a simplificar trámites administrativos y a descomprimir la actividad informal. “Es necesario abrir las puertas a quien quiera poner un comercio”, señaló. Por último, advirtió que los indicadores económicos de la provincia no respaldan discursos optimistas de campaña y consideró que el tiempo para encarar reformas profundas es limitado.