Enrique Eduardo “Kito” Galiana, historiador y escritor correntino, visitó “Historias para contar” en LT7 AM900 y FM Capital 95.3, y habló del General Manuel Belgrano y su paso por Corrientes, y describió: “en Pellegrini y San Luis se lo ve a Belgrano, tuvo un gran amor y sé que dejó un ‘Belgranito’, se reunía con la ayuda de un franciscano, con una mujer que vivía en La Rioja casi Quintana, también apareció en el museo de arqueología”.
El historiador, expresó: “empezaron a aparecer relatos del Museo de Arqueología, de la mujer del cuidador que me contó que Belgrano estuvo viviendo 30 días en Corrientes, que un día la saludó en la penumbra y desapareció”.
Así mismo, el escritor de leyendas e historias, contó: “en Pellegrini y San Luis se lo ve a Belgrano, tuvo un gran amor y sé que dejó un ‘Belgranito’, se reunía con la ayuda de un franciscano, con una mujer que vivía en La Rioja casi Quintana, también apareció en el museo de arqueología”.
Asimismo, relató otra historia: “una experiencia que tuve con Rafael Costa, cuando estábamos con el director del Teatro Vera, sentados adentro, con vaso de agua casa uno, sentí un frío en mi espalda, y les dije “tenemos presencias extrañas” y Rafael no me creyó hasta que el vaso de agua que estaba tomando se llenó de burbujas”.
“Los muertos nos protegen, tengo una historia de un niño que fue enterrado en mi casa en el 1800, y lo enterraron en terreno porque fue muy amado, y yo les dije que lo dejen ahí, es Antoñito y sé que me marca los libros, mueve las sillas, las cosas, y a los que alquilan el lugar les aclaré que hay un nene que está viviendo ahí” describió.
A su vez, “Kito” Galiana, comentó: “el Teatro Vera fue la Iglesia de los dominicos, ahí hay gente enterrada en los cimientos del Teatro Vera, un día fui a hacer una grabación, entré un rato al baño y me topé con un hombre vestido como del siglo 18, le saludé porque pensé que era un actor, salgo de baño, y espero, lo vi muy blanco y sentí frío. El guardia se acerca y me dice qué estaba esperando, y le digo que al señor que está adentro, y me dice el guardia ‘deje tranquilo a nuestro fantasma”.
Por último, el historiador, mencionó: “el Sanatorio del Litoral, era la casa de Ana María Pampín, sacaron después cuerpos de mujeres que estaban enterradas, y ahora hay un cuidador que se encarga del terreno porque nadie quiere alquilar, porque aparece la dama de blanco, la ven, la gente que trabajó en el lugar la vio y no querían trabajar cuando anochecía porque aparecía”.
Comments